Union Europea abandona a los opositores pacificos cubanos

POLITICA
Unión Europea abandona a los opositores pacíficos cubanos

Aleaga Pesant

LA HABANA, Cuba, septiembre (www.cubanet.org) - Los representantes de
las naciones que constituyen la Unión Europea tienen vetado cualquier
tipo de ayuda a los opositores pacíficos cubanos, más allá de aceptarlos
en las embajadas y conversar con ellos en público, señalan fuentes bien
informadas y dignas de todo crédito.

Según analistas, esta actitud por parte de los gobiernos en el seno de
la Unión Europea se debe ante todo a tratar de no provocar en lo más
mínimo al gobierno militar, con el que tienen un alto nivel de
intercambio comercial.

Así, la suma de los países de la UE van rezagados de los diplomáticos
japoneses y noruegos, quienes apoyan de manera más activa a los
reformistas de la isla; pero muy por delante de los representantes
latinoamericanos, quienes no aceptan recibir a los "agentes de cambio",
a tal punto que algunos huyen cuando los encuentran en alguna actividad
protocolar. En estos casos están los diplomáticos argentinos, los
mexicanos y los brasileros.

Punto y aparte merece la sección de intereses de los Estados Unidos, la
que desarrolla un esfuerzo descomunal de apoyo a la democracia en Cuba.
El esfuerzo norteamericano va desde la creación de centros de
información y de salas de navegación para Internet, hasta la entrega de
libros, periódicos y revistas, radio receptores de onda comercial y
linternas.

Sin embargo algunos especialistas esperan un cambio importante en la
política española y europea con el nombramiento de la socialista
Trinidad Jiménez al frente de una subsecretaría de la cancillería
española para ibero América.

Más cauteloso, el portavoz del Arco Progresista, Manuel Cuesta Morúa,
señaló sobre el nombramiento, que este "no provocaría un cambio
traumático, pero si podría dar un mejor enfoque, para afinar la política
española hacia la isla."

Trinidad Jiménez, quien fue Secretaria de relaciones Internacionales del
Partido Socialista Obrero Español (PSOE), escenificó un fuerte careo a
finales del año pasado con el Dr. Castro a raíz mítines de repudio y
golpizas de que fueron víctimas varios miembros del Arco Progresista y
del Consejo Editorial de la Revista Consenso, por miembros de las
Brigadas de Respuesta Rápida (BRP).

Sin embargo, al hecho de negar ayuda a los opositores pacíficos, se suma
que la Unión Europea es el principal soporte económico del gobierno de
la isla. Así lo acredita un estudio del 2004 del Cuban Transition
Project, que señala a Europa como el principal soporte financiero de la
dictadura cubana, con una ayuda de 1.6 miles de millones de dólares,
seguidos por Venezuela y en tercer lugar por China.

El estudio, obra de un equipo de investigaciones de la Universidad de
Miami, apareció en el número 62 de la revista digital del Proyecto de
Transición Cubana (CTP, por sus siglas en inglés) con el título "La
Unión Europea y Cuba: ¿Diplomacia o Duplicidad?".

Señala que entre los países europeos más comprometidos con la economía
de la dictadura cubana están Francia con 529, Holanda 295 y España 294
millones de dólares anuales. Esto significa, que, mientras se niegan
cooperar con los demócratas, entre los tres países entregan a los
represores más de 1000 millones de dólares por concepto de ayuda económica.

El régimen militar no está sujeto a los funcionarios y burócratas de
Bruselas, y por lo tanto no les teme; pero a su vez está profundamente
endeudado con los capitalistas europeos.

Sin duda los financieros e industriales europeos ven en la isla una
oportunidad de inversión de alto riesgo, pero de altos beneficios
repatriables recogidos en las leyes cubanas, aunque en los últimos
tiempos han recibido algunas desilusiones.

Los bancos europeos, por ejemplo, no sólo han invertido alrededor de US
$400 millones en la estratégica industria del níquel (la exportación más
rentable de Cuba, que generó en 2004 US $800 millones para el régimen)
sino que también realizan las transacciones de gran parte del comercio
exterior de la isla, incluyendo el financiamiento de corto plazo para la
compra "al contado" de casi mil millones de USD en productos agrícolas y
alimentos producidos en los Estados Unidos desde diciembre de 2001.

Mientras la UE niega su apoyo a los demócratas, el financiamiento
europeo -según los datos que ofrece CTP- ha sido una de las tablas de
salvación constantes con las que el gobierno cubano ha contado desde el
final de los subsidios soviéticos en 1990.

Aunque prestar a Cuba es sin duda empresa sumamente lucrativa para los
bancos europeos, que cobran tasas de interés alto en préstamos de corto
plazo, los gobiernos europeos que han extendido créditos comerciales más
generosos a las empresas estatales cubanas se han quedado con
considerables deudas. Por ejemplo, la empresa francesa COFACE, que ha
ofrecido financiamiento garantizado por el gobierno para exportaciones
francesas a Cuba, tuvo que asumir US $92 millones en pérdidas (9) en un
período de dos años (2002-2003), mientras La Habana recibía más de US
$500 millones anuales en facilidades crediticias de prestadores franceses.

Aunque Paris ha suspendido temporalmente el financiamiento de COFACE
para la isla, quienes elaboran las políticas europeas con mentalidad de
ayuda humanitaria han movido con su ejemplo, fomentando el
establecimiento de estrechos vínculos financieros y comerciales con la
dictadura más larga de América Latina.

Ciertamente, ni la Unión Europea ni ninguno de sus estados miembros han
hecho esfuerzo alguno para interferir con el flujo de capital europeo
privado hacia Cuba, mucho menos con los viajes que despreocupadamente
realizan sus ciudadanos quienes, junto con los canadienses, han
contribuido con el grueso de los aproximadamente dos mil cuatrocientos
millones (USD) de ingresos derivados del turismo recibidos por el
gobierno cubano el año pasado para invertir en su sistema represivo.

Detrás de la farsa política entre Bruselas y La Habana, la Unión Europea
ha seguido jugando un papel crucial en sostener la única dictadura del
proletariado de Latinoamérica. En el proceso, las elevadas alocuciones
europeas sobre democracia y derechos humanos se han convertido, para los
opositores cubanos, en palabras huecas sin importancia.

http://www.cubanet.org/CNews/y06/sep06/20a8.htm