Unidad de la oposición, ausente en la Declaración de Morelos
julio 8, 2015 11:09 am·
Cuba actualidad, Capdevila, Boyeros, La Habana, (PD) Desde que el
general Raúl Castro asumió la presidencia de Cuba, cada uno de los
diferentes grupos que integran el movimiento opositor marcha por su
rumbo, lo que como es natural le ha sido extremadamente ventajoso al
régimen militar, que ha sabido sacar sustanciales provechos de la máxima
"divide e impera".
No resultó raro que los opositores, en Cuba y el exilio, reaccionaran de
modo diferente ante el anuncio del 17 de diciembre de 2014 por los
presidentes Barack Obama y Raúl Castro del restablecimiento de las
relaciones diplomáticas entre los dos países.
Algunos se han dejado arrastrar por la idílica visión del presidente
Obama, y han adaptado posturas realmente oportunistas como atreverse a
catalogar las epidérmicas medidas tomadas por el gobierno cubano de
reformas y considerarlas el inicio de la era pos-totalitaria, cuando la
realidad es que no ha sido tocado ni un pelo de la estructura del Estado
socialista corporativo, dirigido por el Partido Comunista, donde los
órganos ejecutivo, legislativo y judicial no tienen ninguna
independencia, sino que tienen que acatar las decisiones tomadas por la
máxima dirigencia.
Después del 17 de diciembre de 2014, ante el nuevo escenario surgido,
cabía esperar que las diversas agrupaciones opositoras encaminarían sus
esfuerzos a lograr un consenso, que se materializara en la constitución
de una plataforma común de las diferentes fuerzas prodemocrática cubana
y el exilio, que elaborara un programa coherente, realizable y creíble,
que incentivara a todos aquellos que si bien no forman parte de ninguna
de las organizaciones opositoras, mantienen posturas contestatarias y de
ruptura con el régimen, porque es principalmente a ellos a quienes hay
que atraer y sobre los que hay que dirigir el trabajo político.
Pero ocurrió todo lo contrario. Ahora, en un extremo del mapa opositor
está Espacio Abierto de la Sociedad Civil, en el que se agrupan los que
apoyan vehemente la reanudación de las relaciones con Estados Unidos, y
en dirección contraria, el Foro por los Derechos y las Libertades, cuyos
integrantes rechazan hacerle concesiones al régimen mientras este no
respete los derechos humanos y las libertades fundamentales.
En los últimos meses las noticias que llegan de las agrupaciones
opositoras son desalentadoras: continúan separadas y enfrentadas.
Ante los nuevos escenarios, lo que se impone es la unidad, pero todo
parece que por el momento no existe voluntad para materializarla.
De lograrse la unidad, se sumarian a la oposición muchos sectores de la
sociedad que están desilusionado de un gobierno que ha sumido al país en
la ruina.
El régimen ha creado una arquitectura legal que no le concede ningún
espacio ni reconocimiento a la oposición. Nunca ha hecho la mínima
distinción entre sus integrantes, a quienes siempre han catalogado de
contrarrevolucionarios y mercenarios.
Los representantes de las organizaciones de la sociedad civil
oficialista mostraron una falsa unidad en pro del régimen en la VII
Cumbre de las Américas celebrada en Panamá, al negarse a compartir
espacios donde estuvieran acreditados los que calificaron de
"mercenarios y apátridas pagados por los enemigos del gobierno cubano".
Es decir, para el régimen, eran lo mismo, contrarrevolucionarios, los
representantes de Espacio Abierto, el Foro por los Derechos y las
Libertades o las organizaciones del exilio, presentes en la Cumbre.
A la Cumbre, los opositores asistieron divididos, sin un discurso común,
que denunciara las penalidades de la mayoría de los cubanos, los que
viven de los mandados de la libreta de abastecimiento, que duran para
mal comer no más de 10 días, los sin casa, los que cobran salarios de
miseria, los que por el color oscuro de su piel ven como se les cierran
todas las oportunidades de conseguir trabajos bien remunerados, los que
para poder mal vivir delinquen y abarrotan las cientos de cárceles que
hay en Cuba.
Al estar dividida la oposición, la dictadura pudo imponer su discurso en
la Cumbre de las Américas.
Un grupo de opositores cubanos, que se reunieron en Morelos, México, del
18 al 22 de junio, bajo el patrocinio de la Fundación Konrad Adenauer y
la Organización Demócrata Cristiana de América (ODCA), dieron a conocer
el documento Por una Cuba Democrática.
En dicho texto, del asunto de la unidad, de la concertación, de una
plataforma común, nada. Los firmantes de la Declaración de Morelos se
limitaron a señalar: "Nos proponemos incrementar y fortalecer los grupos
de la sociedad civil y la oposición política en Cuba, articulando sus
mensajes e iniciativas con respeto y solidaridad hacia sus diversas
líneas de acción pacíficas".
De los 28 firmantes, curiosamente 9 lo hicieron a título personal, es
decir que asistieron al evento sin representar a ninguna organización.
El Foro por los Derechos y las Libertades, que agrupa a más de 20
organizaciones opositoras, ninguno de cuyos integrantes estuvo en el
evento, no necesita que los firmantes de la Declaración de Morelos los
incremente ni fortalezca ni que articulen "mensajes e iniciativas" con
respecto a su línea de acción.
Eso ya está más que realzado dentro del Foro. Lo que tienen que hacer
los firmantes de la Declaración, todos los cuales son integrantes de
Espacio Abierto, es dar el urgente paso para articular y lograr de una
vez por todas la unidad dentro de la diversidad de todas las fuerzas
opositoras. Es esa la solución, no hay otra.
Para Cuba actualidad: origenesmadibas@gmail.com
Source: Unidad de la oposición, ausente en la Declaración de Morelos |
Primavera Digital -
http://primaveradigital.net/unidad-de-la-oposicion-ausente-en-la-declaracion-de-morelos/
No comments:
Post a Comment