China causa temor a espanoles en Cuba

China causa temor a españoles en Cuba

La Habana/efe — Los empresarios españoles en Cuba confían en que el gobierno cubano valore su esfuerzo y apoye su permanencia en la isla, en un momento en que ven con “preocupación” la creciente presencia de otros países, tal como China, en el mercado local.
“Pido a las autoridades cubanas que valoren este esfuerzo durante tantos años para que la permanencia empresarial española se mantenga e incremente”, dijo anoche el presidente de la Asociación de Empresarios Españoles en Cuba, Víctor Moro, durante la cena anual de la organización.
En presencia de los ministros cubanos de Inversión Extranjera, Marta Lomas, y Economía, José Luis Rodríguez, y del presidente del Consejo Superior de Cámaras de Comercio de España, Javier Gómez Navarro, Moro defendió el “esfuerzo” desarrollado por las empresas españolas para mantenerse en Cuba desde la década de los 90 y su intención de profundizar en esta estrategia.
Además de pedir al gobierno cubano que valore esta actitud, Moro pidió a las autoridades españolas que consoliden con Cuba “un renovado escenario de colaboración, que resuelva los problemas ya endémicos que dificultan nuestras relaciones comerciales”.
“Vemos con preocupación como otros países, sin la vinculación cultural e histórica de España, incrementan su presencia en el mercado cubano favorecidos por políticas comerciales más beneficiosas y realistas”, añadió.
A su juicio, “sobre el marco de nuestras relaciones inversoras y comerciales” pueden articularse fórmulas que avancen en la solución de la deuda cubana y favorezcan las intervención de la empresa española en Cuba.
Según datos de la Asociación, los empresarios españoles mantienen el 13 por ciento de la cuota de mercado en Cuba y España es el segundo proveedor de la isla y el primero en importaciones no energéticas.
Las exportaciones españolas a Cuba durante el pasado año ascendieron a 538 millones de dólares.
Más de 90 empresas españolas participan en la Feria Internacional de La Habana que abrió el lunes sus puertas en la capital cubana con la asistencia de unas 1.900 compañías de 43 países, pero recelan de avances chinos, que se ha convertido en uno de los principales aliados de La Habana, con un comercio superior a los 500 millones de dólares.

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