Ni libertad económica ni libertad política

Ni libertad económica ni libertad política
OSMAR LAFFITA ROJAS | La Habana | 1 de Septiembre de 2016 - 09:44 CEST.

Luego de que el general Raúl Castro asumiera la presidencia en el año
2008, mediante varias disposiciones legales fue autorizado el desempeño
de la actividad económica privada. Gracias a ello, medio millón de
cubanos ejercen alguna de las 201 actividades que están amparadas en la
Resolución 42 del Ministerio de Trabajo y Seguridad Social (MTSS). Pero
a ninguna de esas personas se les reconoce personalidad jurídica, sino
que son consideradas personas naturales. Por tanto, los principio del
Derecho Mercantil, las leyes que regulan los mecanismos del mercado,
todavía están a la espera de que se apliquen en Cuba.

Es exagerado afirmar que el restablecimiento de las relaciones
diplomáticas entre Washington y La Habana significa el cierre de un
ciclo y el comienzo de otro. Poco ha cambiado. Hay que tener presente
que las leyes Helms-Burton y Torricelli están codificadas por el
Congreso de EEUU y su derogación dependerá de que el Gobierno cubano
inicie un proceso de reformas, tanto políticas como económicas, que
conduzcan al establecimiento de un Estado de derecho, hoy ausente en Cuba.

En la Conceptualización del Modelo Económico y en el documento que
recoge los 267 lineamientos económicos, ambos aprobados en el VII
Congreso del Partido Comunista (PCC), queda bien claro que la dirección
de la economía se rige por la planificación centralizada y no por las
leyes del mercado.

En la Conceptualización del Modelo se dice que "la presencia de
diferentes actores de propiedad y gestión forma parte de los elementos
que condicionan la necesidad objetiva del reconocimiento del mercado". Y
en los Lineamientos se reconoce "la existencia de las relaciones de
mercado".

En ninguno de los dos documentos se hace mención a la economía
socialista de mercado como la que desarrollan China y Vietnam.

Tanto China como Vietnam son países dirigidos por partidos comunistas,
pero en lo económico, el Estado ha aceptado las reglas del mercado. Sus
sostenidos crecimientos económicos responden a las reglas que imponen
las empresas capitalistas presentes en estos dos países, que han
alcanzado altos niveles de crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB).

La Conceptualización del Modelo y los Lineamientos Económicos reconocen,
por primera vez en 56 años, que la propiedad privada cumple una función
social, cuyos titulares son personas naturales o jurídicas, tanto
cubanas como extranjeras, pero solo en determinadas actividades.

No hay duda de que el VII Congreso del PCC fue el escenario que cimentó
el poder de la ortodoxia. Esto quedó refrendado en el artículo 54 (1.1),
acápite 59 del documento de la Conceptualización del Modelo, que
plantea: "El papel dirigente del PCC, único y vanguardia organizada de
la nación, fuerza dirigente de la sociedad y del Estado, tal como
aparece recogido en el artículo 5 de la Constitución de la República".

Contrario a lo que ocurre en China y Vietnam, el VII Congreso del PCC
patentizó que en la economía cubana predominará la planificación
centralizada y que no habrá espacio al libre mercado, que se reforzará
el control vertical del Gobierno sobre la política y la economía.

Los militares que detentan el poder en Cuba, a quienes les aterroriza la
democracia tanto como a los vampiros la cruz, y que no aceptan el
multipartidismo, la libertad de información y de expresión, lograron
imponer en los documentos programáticos acordados en el VII Congreso del
PCC el cierre a todas las bandas de todo lo que tenga que ver con la
libertad política y la libertad económica.

Source: Ni libertad económica ni libertad política | Diario de Cuba -
http://www.diariodecuba.com/cuba/1472715861_24998.html