Arte y poesía, otro Sats en La Habana

Arte y poesía, otro Sats en La Habana
MARÍA MATIENZO PUERTO | La Habana | 17 Jul 2013 - 2:00 am.

El poeta Rafael Alcides hace de su presentación en CaféSATSo un
ejercicio de memoria.

CaféSATSo es quizás una prolongación de Estado de Sats. Después de un
largo período donde solo ha confluido el pensamiento, parece que Sats se
replantea el slogan bajo el que surgió.

Al inicio, en la terraza de la avenida 1era, entre 46 y 60 en Miramar,
se podía escuchar a algunos poetas. Después las circunstancias fueron
radicalizando el terreno y todo fue política para un cambio donde
también hace falta un arte menos complaciente.

Por allí estuvieron Juan Carlos Flores, el Grupo OmniZonafranca, Yoss,
Ángel Santiesteban.

En este nuevo espacio se disfrutó de Rafael Alcides, con una poética que
ha sabido sobrevivir a unos tejemanejes políticos que —en busca de
reivindicar a una generación cercenada—, le han ofrecido el cielo.

Este poeta no cree en los homenajes, ha renunciado al ego y de las
reivindicaciones dice:

"Son necesarias. Claro está. Porque reivindicar es hacer justicia. Pero
son para el otro. En realidad uno trabaja para los demás. Uno es solo un
agente, un intermediario. El único modo de reivindicarnos a nosotros es
haciéndolo con los demás.

"Todos tenemos problemas de conciencia y tratamos de superarlos
resolviendo los problemas de otros, ayudando a los demás pagamos
nuestros errores."

Más que una lectura, el espacio que conduce Ailer González Mena fue, con
Alcides, un ejercicio de memoria lleno de preguntas que profundizaron en
el testimonio de una época oscura de la historia de Cuba.

Para el poeta, una sociedad democrática incluye a todos, incluso a los
verdugos de ayer, a los censuradores y a los censurados de hoy, a los
contestatarios, a los valientes, a los cobardes, a los héroes de mañana.
Toda una lección de vida para los radicales.

Hay que escuchar a Alcides como si fuera el último de los dinosaurios,
con reverencia, aunque él mismo no la exija porque la poesía se defiende
y se homenajea sola.

Aunque Alcides recordó a Heberto Padilla y los más de 15 años que fueron
el "quinquenio gris", los años de ausencia de un hijo en el exilio, o
los extremismos de más de cinco décadas, nos damos cuenta de que el
poeta debió tener mucha fuerza para renunciar a las cámaras y
micrófonos, al Premio Nacional de Literatura, en fin, a la eternidad.
Uno se pregunta si el miedo no fue un factor determinante para encontrar
en la poesía un único refugio.

A Alcides se le ve escéptico por momentos, emocionado siempre. Como
quien ha encontrado un espacio donde no traicionarse a sí mismo. Se
define como "un tipo tremendamente optimista. Siempre creo que el día de
mañana será mejor que el día de hoy.

"Algunos psicólogos te preguntan, ¿si usted fuera al porvenir que
llevaría? Siempre hay quien dice: una ametralladora, una bomba atómica,
una jaba con alimentos. Pero se supone que un tipo que cree en el
porvenir no tiene que llevar nada, tiene que confiar en que allí
encontrará todo lo que necesita para sobrevivir."

¿Pero usted llevaría algo?, le pregunto.

Y responde:

"¿Yo? El recuerdo de los míos."

¿Y la poesía la deja atrás?

"Todo lo que yo he vivido forma parte de mi poesía. Esa es mi poesía."

Source: "Arte y poesía, otro Sats en La Habana | Diario de Cuba" -
http://www.diariodecuba.com/cultura/1374019257_4246.html