Leafar Pérez
LA HABANA, Cuba, octubre (www.cubanet.org) - "Estados Unidos crea y
manipula a su antojo los huracanes, utilizándolos como armas de guerra".
Aunque parezca asombroso, estas son las conclusiones de los artículos
que están circulando por Intranet, la red digital cubana, que para
muchos nacionales es la única fuente de información a que pueden acceder.
Paola Garzia y Sergio Delgado son los autores de los trabajos
periodísticos. Utilizando algunos datos científicos y mucha
especulación, culpan a la NASA y al Ejército de los Estados Unidos de
inyectar cargas de energía a la ionósfera para, mediante antenas
colocadas en aviones de reconocimiento y barcos de guerra, fortalecer a
las tormentas tropicales para que aumenten su poder destructivo justo
cuando pasen por la zona del Caribe y se debiliten cuando entren en
tierra norteamericana.
Lo que sigue parece sacado de las mejores narraciones de ciencia
ficción. "Los militares norteamericanos son capaces de controlar de tal
manera el clima que ordenan las trayectorias de los fenómenos
meteorológicos, así como para no ser considerados culpables dejan que
los huracanes también afecten el territorio de los Estados Unidos, por
supuesto desviándolos hacia zonas deshabitadas o donde vivan
fundamentalmente negros y latinos".
Nada mejor que leer uno de los párrafos de semejante material: "Expertos
recordaron que desde fines de la década de los años 60 y principios de
los 70 la NASA realizó los primeros experimentos. El huracán Mitch fue
uno de ellos, que se convirtió muy rápidamente en un potente meteoro que
asoló las tierras centroamericanas. Se plantea que científicos
norteamericanos perdieron el control de la naturaleza y del rumbo
calculado y diseñado; y que en lugar de afectar las costas de Cuba como
eran los propósitos, se dirigió a Honduras y México con una enorme
secuela de muertos, desaparecidos y daños materiales".
¿Cuál es el objetivo de estos experimentos? Manejar la ionósfera sería
la nueva forma de dominio mundial de los Estados Unidos. Más económico
que utilizar ejércitos y bombas atómicas. Buenos resultados a más bajo
costo. Debemos recordar que Fidel Castro, el comandante devenido
compañero, afirmó en uno de sus tantos e interminables discursos que del
enemigo del norte no podíamos esperar nada bueno porque hasta los
frentes fríos venían de allá.
Los trabajos enfatizan como esta nueva forma de dominio imperialista
tiene como objetivo doblegar económicamente a las naciones, una nueva
forma de mostrar el embargo. Según Sergio Delgado, "el gobierno
norteamericano, después de crear los huracanes y encaminarlos hacia
tierra cubana para que destruyan todo a su paso, se brindará para apoyar
en la reconstrucción para meter sus garras en el continente".
Tal parece que estos trabajos dan razones para justificar la negativa
del gobierno a recibir ayuda de los Estados Unidos. Si el imperialismo
utiliza esta nueva arma de guerra entonces "nuestro deber es vencer",
como expresó Castro en una de sus Reflexiones.
Tan endeble resulta la argumentación de este engendro, que Delgado
reconoce que todos pueden cuestionar que los huracanes también dañan al
territorio norteamericano, pero se justifica argumentando: "Estados
Unidos es una potencia que puede superar estos conflictos y desastres en
su territorio porque tiene la tecnología y los recursos".
Nada, que cuando se declare una amenaza de huracán, ya está avisado: "es
el imperialismo norteamericano que ataca nuevamente".
No comments:
Post a Comment