Laritza Diversent
LA HABANA, Cuba, octubre (www.cubanet.org) - El diario Granma anuncia
que mantendrá precios fijos en los productos agrícolas. El gobierno
intenta proteger el mercado interno de la especulación, el acaparamiento
y el alza de los precios, provocados por el desabastecimiento que
dejaron los huracanes Gustav e Ike.
Granma reconoció, en su edición del 29 de septiembre, que estaba
"autorizado a informar que en las circunstancias actuales no habría
subidas de precios de ningún bien de primera necesidad, normado, de
venta liberada u ofertado en las tienda recaudadoras de divisa".
El pasado 23 de septiembre el comentarista de temas económicos Ariel
Terrero, en el espacio televisivo de la mañana "Buenos Días", opinó que
el aumento de los precios en el mercado agrícola era algo lógico en
tiempos de crisis.
Aseguró que el problema no se resolvía con un ejército de inspectores
para controlar el mercado agrícola. Aconsejó poner los precios fijos por
un período de tiempo determinado para amortiguar los efectos de la
crisis alimentaria.
El 29 de septiembre, Granma informaba que respecto a los productos del
agro se había decidido "mantener en los mercados agropecuarios estatales
y puntos de venta los precios acordados por el Consejo de Administración
Provincial", órgano de la Asambleas Provinciales del Poder Popular en
las provincias.
Informó, además, que en los mercados de oferta y demanda se establecerán
provisionalmente como precios máximos los existentes antes de los
huracanes para un grupo de productos básicos. El gobierno no tuvo en
cuenta, a la hora de establecer estos precios topados, la subida de los
precios del combustible. Tampoco estableció un límite de tiempo en los
que debían regir.
Mientras el huracán Ike azotaba el oriente del país, el Ministerio de
Finanzas y Precios, por medio de la Resolución 206 del 8 de septiembre
de 2008, incrementó los precios minoristas, en pesos convertibles, de la
gasolina y el diesel que se vende a la población.
Granma califica de ficticios los rumores echados a rodar sobre "escasez
de productos que motivaban compras excesivas y el consiguiente
desabastecimiento momentáneo". Por su parte, el 30 de septiembre, Ariel
Terrero, en su referido espacio, reconoce que hay desabastecimiento en
los mercados agropecuarios y que un decrecimiento en la producción
afecta la oferta y la demanda.
Argumentó que más del 70% de las plantaciones de plátano del país se
perdieron. Uno de los principales productos que carga la demanda. Afirmó
también que se tomó como medida para recuperar la agricultura el cultivo
de ciclos cortos (3 meses). Pronosticó que para el segundo semestre de
2009 se sentirían discretos síntomas de recuperación de la producción
agrícola, comparados con los que existían antes del paso de los huracanes.
laritzadiversent@yahoo.es
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