ECONÓMICA
2007-09-28.
Silvio Benítez Márquez, Vicepresidente del (PLNC), Miembro de la Unidad
de la Republica de Cuba
El régimen comunista se apresta por estos días, a engrasar su maquinaria
propagandística con vista a las próximas elecciones, a efectuarse en la
nación cubana en medio de una crisis económica severa y el descontento
creciente de sus ciudadanos con las promesas infundadas que lastran ya
cerca media centuria.
A estos regímenes autoritarios no les agrada nada saber de elecciones y
simulan tácitamente tener todo bajo control. Todos los candidatos son
afines a la doctrina marxista- leninista, excluyendo cualquier
pretensión de candidatura de algún opositor.
Sería bueno acentuar que este teatrito orquestado por la cúpula del
desgobierno del hermano menor de los Castro y sus más fieles parapetados
secuaces no significará ningún cambio en la realidad cubana.
. No es serio seguir esquivando la realidad que acontece en la Cuba
actual. Es fácil describir los resultados de estos comicios, la
abstención incalculable, la mayoritaria cuantía de boletas en blanco y
la falta de seriedad y transparencia de los que bajo el temor de
represalias acuden y venden su legítimo derecho de sufragio.
Pero para mas asombro, tantas décadas de cacareo y adoctrinamiento no
han bastado, a los mismísimos cancerberos de la dictadura del
proletariado, para ocultar la verdadera esencia del mejunje
eleccionario. Lo más significativo de esta, seria conocer si el
articulista en jefe se postula o deja el comodín al continuista de su
hermano.
En naciones antidemocráticas, cuando sus gobernantes auspician
elecciones fraudulentas, no calculan el costo y peso de ese derecho
inalienable. Las elecciones no solo son la vida de las democracias,
también son la muerte de las dictaduras.
Un desesperante panorama de asfixia, no presagia buenos augurios. La
retórica gubernamental no conoce ni tiene poder de convocatoria. Ejemplo
elocuente se pone de manifiesto con la mínima participación y apatía de
los ciudadanos en las asambleas de cada circunscripción.
Un espectro de incertidumbre recorre toda la isla, ante un sufragio sin
legitimidad y manipulado, donde el personalismo de un tirano que
disocia entre lagunas y, no permite ceder el liderazgo, aparentando
físicamente estar vivo y políticamente muerto.
Son el compás de espera de un segundón que fustigó la ambivalencia y la
burocracia de los cuadros dirigentes del sistema comunista en el
reciente discurso del 26 de julio.
El tiempo ha pasado desde el 31 de julio del 2006 hasta la fecha. El
interino y su coman cola no dan buena espina, el deseo de cambio, de
vivir en libertad, el respeto a los más elementales derechos humanos, no
son los puntos que lleva el candidato sucesor en su agenda.
Estas elecciones tienen un solo propósito, el de legitimar la dictadura,
cubriéndose con un parlamento castrado que ni legisla, ni debate, ni
decide ninguna de las cuestiones más vitales de la nación cubana.
http://www.miscelaneasdecuba.net/web/article.asp?artID=11864
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