Saturday, April 16, 2016

El exilio cubano en la encrucijada

El exilio cubano en la encrucijada

La Comisión de Miami Beach no aprobó el establecimiento de un consulado
cubano
El exilio reprocha la prohibición de entrada por vía marítima en Cuba a
los cubanos de la diáspora
Miles de emigrantes cubanos se encuentran atascados en la geografía
centroamericana
DANIEL SHOER ROTH
dshoer@elnuevoherald.com

La vigorosa y valiente voz del exilio cubano tradicional no se apaga,
aun cuando alguna gente conjetura que su extinción es ineludible por los
cambios generacionales e ideológicos.

Aquella es una voz que impulsa a salir del silencio y de la soledad, en
búsqueda de la razón y de la justicia. Hace frente a la impotencia de su
orfandad en estos tiempos.

Reclamos sustentados en la dignidad propia y en el sufrimiento apilado
durante décadas cosecharon una victoria esta semana: la Comisión de
Miami Beach contuvo una propuesta que habría permitido el
establecimiento de un consulado cubano a pocos pasos de las sublimes
playas en las que olas de exiliados pisaron los arenosos caminos de la
superación lavando platos, aseando hoteles y aparcando vehículos. Su
presencia en cualquier municipio del Sur de Florida, proclive a brotes
de violencia, espanta y ofende a un sector de la población.

Esa misma voz de la conciencia, resistente al insensible consejo de
"borrón y cuenta nueva", manifestó su furor a las puertas de la sede de
Carnival Corp. por actuar esta empresa como testaferro del régimen
comunista, al impedir a los ciudadanos o residentes de Estados Unidos
nacidos en suelo cubano abordar los cruceros de una filial suya que
pronto surcarán las tempestuosas aguas de un vasto cementerio con
destino a la isla. Se trata de una flagrante discriminación por
nacionalidad y concreta violación de los derechos civiles, objeto de una
demanda colectiva presentada días atrás en un juzgado federal de Miami.

Pero, si bien ambas protestas están hilvanadas por un común patrimonio
de dolor irresuelto, por un anhelo de la política de paz y apertura
democrática allende los mares, también son algo contradictorias.

Por un lado, el exilio recrimina la apertura de una oficina de servicios
consulares que facilitaría los hoy ajetreados y costosísimos trámites de
viaje para miles de cubanos que regresan de visita como Santa Claus,
rebosantes de regalos para sus familias y de divisas que animan la
economía isleña. Por el otro, el exilio reprocha, en esencia, la
prohibición de entrada por vía marítima impuesta por La Habana a los
cubanos de la diáspora, política a la cual obedece el sometimiento de
Carnival a las veleidades del castrismo. En el rechazo autoritario, en
las puertas cerradas de la patria del alma, yace la causa de la ira.

Ni sí ni no, sino todo lo contrario. Con este refrán pudiera definirse
la polémica que despiertan los viajes de cubanos "exiliados" a Cuba.

Una paradoja de similar connotación emerge en el frente migratorio.

Nuevamente, miles de emigrantes cubanos se encuentran atascados en la
geografía centroamericana en su sendero al paraíso dorado apellidado
Florida. Sí, el éxodo persiste, señal de que el acercamiento entre
Washington y La Habana no infunde grandes esperanzas. Como los gobiernos
de estas naciones están incapacitados para actuar de receptores
temporales, ahora los cubanos en Ecuador –punto de partida de este
peligroso recorrido– demandan un puente aéreo a Estados Unidos. La Ley
de Ajuste Cubano, custodiada celosamente por el exilio, es imán de esta
crisis.

Al mismo tiempo, el exilio se siente ultrajado ante los abusos a esta
ley de acogida preferencial cometidos por coterráneos que profanan su
espíritu legítimo, yendo y viniendo de la isla tras derrochar cientos de
dólares en visas y pasaportes cubanos, así como orquestando fraudes y
robos millonarios para luego huir a Cuba con dinero saqueado al erario
norteamericano, según documentó el Sun Sentinel. El miércoles, Marco
Rubio intentó infructuosamente que el Senado acabara con los beneficios
inmediatos de asistencia social si el amparado no puede demostrar
persecución. Enseguida lo tildaron de "anticubano".

Porque la comunidad cubana en Miami anhela –y debe– tender una mano
fraternal y humanitaria a sus compatriotas, como lo hizo magnánimamente
durante más de medio siglo. Sin embargo, ha de velar también para que
dicha ayuda no termine en manos enemigas. Una encrucijada histórica de
sumo cuidado, en la que no será nada fácil hallar una salida.

Escritor venezolano, periodista, biógrafo y cronista de Miami.

Source: El exilio cubano en la encrucijada | El Nuevo Herald -
http://www.elnuevoherald.com/opinion-es/opin-col-blogs/daniel-shoer-roth/article72101502.html

No comments: