Gastronomía falta de excelencia

Gastronomía falta de excelencia
[02-12-2014 04:10:57]
Aimée Cabrera
Corresponsal

(www.miscelaneasdecuba.net).- Son muchos los restaurantes, cafeterías y
bares que pertenecen a cooperativas no agropecuarias. En la capital se
ha visto el cambio en locales que antes eran feos y deprimentes y hoy
lucen diferentes, pues se han acometido remozamientos en los mismos, se
han pintado y sus trabajadores usan uniformes nuevos, y en el caso de
los restaurantes, todas sus mesas están vestidas con manteles limpios y
nuevos.
En la capital ya son unos cuantos. Casi todos en Moneda Nacional CUP
aunque hacen el cambio en la moneda CUC. La aceptación de los mismos por
la población no ha sido rotunda. ¿Qué sucede? La mayoría de los
entrevistados insisten en que los precios de las ofertas son muy caros y
no pueden pagarlos.

"Mira, están limpios, la comida no está mala, pero no puedo pagar más de
cien pesos por una comida con mi familia. Soy casado y tengo dos hijos.
¿En cuánto me sale lo de 4 personas? No hay bolsillo que pueda. Cuando
era niño, mis padres me llevaban a los restaurantes los domingos o
cuando era una fecha señalada, en aquellos tiempos, los precios estaban
acorde con los salarios, no ahora", enfatiza un trabajador del
Ministerio del Transporte.

Otros, como Magda González, residente en el municipio Plaza se quejan
además del trato. "No entiendo que tenga que sentarme en un restaurante,
esperar muchísimo para que me atiendan como es debido y ver un trato
poco agradable, como si me estuvieran haciendo un favor, pero y si yo
estoy pagando, de verdad que no entiendo", acotó.

Para estos trabajadores sucede que a veces tienen deseos de triunfar
pero carecen de la capacitación adecuada. Ellos se esmeran en darle
mantenimiento al lugar, pero olvidan las reglas de cortesía, complacer
al cliente, mostrar una sonrisa, no demorar los pedidos, saber servir
los platos, entre otros detalles.

Y por otra parte, ellos deben aumentar los precios de las ofertas ya que
con las recaudaciones deben pagar los consumos de agua, electricidad,
gas para cocinar, los salarios, y pagos de impuestos por su condición de
trabajadores por cuenta propia.

"Debieran abrirse centros de capacitación para quienes brindan servicios
como trabajadores no estatales. Ya sean los que trabajan vendiendo ropas
y calzados como los peluqueros y barberos, o los que son dependientes y
despachan alimentos. Tienen que aprender cómo ser amables, cómo hacer
gestión de venta, de ofertas, esos son conocimientos que se deben
impartir en cursos donde no solo haya teoría sino prácticas", opina
desde el municipio Cerro, una profesora del nivel medio superior que
pide no ser identificada.

Otra problemática para estos cooperativistas no agropecuarios es que no
tienen un mercado donde puedan abastecerse, sino que tienen que
conseguir los insumos en las tiendas recaudadoras -caras en exceso- o en
el mercado negro, lo que puede costarle la imposición de multas u otras
medidas desfavorables.

La culpa no es de los trabajadores sino del gobiernos municipal y
provincial. Ellos no han sido capaces, en casi en un lustro de proveer a
estas cooperativas, de todo lo que necesitan para que prosperen a la par
de la economía nacional.

Las trabas son muy comunes. El bloqueo económico no es el autor
principal o secundario de todas estas situaciones negativas para el
comercio, la gastronomía y los servicios privados. Sus trabajadores
necesitan también orientaciones, no las obsoletas que llegan "de arriba"
para entorpecer el desarrollo y el éxito, sino las que transformen de
manera favorable a este sector.

Source: Gastronomía falta de excelencia - Misceláneas de Cuba -
<http://www.miscelaneasdecuba.net/web/Article/Index/547d2dc13a682e0c544ca532#.VH10dzHF_rM>