El Grito de Baire

Publicado el lunes, 02.24.14

ORESTES RODRIGUEZ: El Grito de Baire
ORESTES RODRÍGUEZ
En la conmemoración del 109 aniversario del Grito de Baire, es obligado
evocar las circunstancias que dieron lugar a quienes iniciaron la lucha
por la independencia de Cuba, aquel 24 de febrero de 1895.

Fue el esfuerzo y pujanza de José Martí para cohesionar y reunir a las
viejas y experimentadas figuras de la Guerra de los Diez Años y llevar
adelante la "guerra necesaria" en suelo cubano. Después del Zanjón,
aquellos aguerridos patriotas se habían dispersado por distintos lugares
de Latinoamérica. Maceo, Roloff, Estrada Palma y otros, a quienes Marco
Aurelio Soto, presidente de Honduras de 1876-1883, había llevado su
hospitalidad al extremo de instalar en puestos militares y
administrativos, con excepción de Máximo Gómez, cincinato arisco, que
había preferido dedicarse a sembrar añil por su cuenta en San Pedro
Sula. Mientras tanto, en Nueva York, Martí asistió el 24 de agosto de
1883 a la conmemoración del centenario de Simón Bolívar, y en un
encendido discurso, señaló: "Señores, el que tenga patria, que la honre;
y el que no, que la conquiste".

A pesar de la dispersión de aquellos próceres, el ideario de
independencia no se había evaporado en sus espíritus. Martí fue el
factor fundamental para ir preparando el ideal separatista y llevar la
conspiración a la Isla con el apoyo de los jefes revolucionarios y de
las emigraciones y en la misma Cuba. Bajo los lineamientos del Partido
Revolucionario se autorizó el comienzo de la guerra el 24 de febrero,
como única posibilidad de alcanzar la independencia. Desembarcaron en
tierras cubanas Martí, Máximo Gómez, Maceo y otros jefes en el mes de
abril de ese 1895. A pesar del decurso de más de un siglo, Cuba padece
nuevamente de la carencia de las libertades y su pueblo se agita en un
mar de inseguridades y privaciones.

En efecto, en esta conmemoración de tan magna efeméride, Cuba padece un
régimen que es ajeno al ideario martiano y de aquellos próceres, pues la
isla es gobernada por una dictadura que supera el medio siglo, en medio
de la colisión ideológica cuando una oposición pacífica viene siendo
víctima de abusos y atropellos, a pesar de que Cuba es signataria de la
Declaración Universal de los Derechos del Hombre y ha suscrito la Carta
Democrática Interamericana, vigente desde el 11 de septiembre de 2001,
cuyos cuerpos legales obligan a los estados al cumplimiento de
brindarles a sus pueblos las libertades que se derivan del derecho del
sufragio universal para que surja el Estado de Derecho. Y tanto es así,
que el artículo 1 de dicha Carta dice: "Los pueblos de América tienen
derecho a la democracia y sus gobiernos la obligación de promoverla y
defenderla. La democracia es esencial para el desarrollo social,
político y económico de los pueblos de América".

Miles de cubanos han perdido la vida y sufrido presidio con tal de no
permitir, a ningún precio, la llegada de una dictadura o de alguna otra
corriente, de izquierda o de derecha, El cubano ha soñado con la
democracia, el espléndido invernadero en donde germina lo mejor del
género humano, para que nadie pueda imponer su voluntad de un manotazo.

Razón tenía Marti al decir que había "pueblos alegres y pueblos
tristes". Cuba está entre estos últimos, hasta tanto no regrese a un
entorno administrativo de respeto irrestricto a los elementales derechos
de cada cual en las esferas políticas, económicas, sociales y
culturales. Decirle adiós a todas las prisiones que el cubano ha tenido
y tiene como morada cumpliendo sanciones derivadas de su oposición al
régimen que lo sojuzga.

Abogado cubano. Reside en Miami.

Source: ORESTES RODRIGUEZ: El Grito de Baire - Opinión -
ElNuevoHerald.com -
http://www.elnuevoherald.com/2014/02/24/1686197/orestes-rodriguez-el-grito-de.html