[26-12-2011]
Julio César Gálvez
Preso de Conciencia de la Causa de los 75
(www.miscelaneasdecuba.net).- No es mi intención comentar el excelente
filme de Jack Nicholson, todo un referente de buen cine, que utilizo
para dar nombre a este trabajo. Voy a referirme a la disposición de "
liberar " a 2,900 presos, " por razones humanitarias " anunciada por
Raúl Castro, durante la última sesión del Parlamento cubano,
recientemente concluido.
Saludo como positiva la medida y me alegro por todos a quienes les tocó
el " Gordo de la Lotería" sin distinción alguna. Sólo que esa decisión
es otra gran mentira del régimen de la Habana en su rejuego de la
desinformación y la urgente necesidad de tratar de seguir limpiando la
sucia y deteriorada imagen del totalitarismo cubano en el ámbito
internacional, para de esa forma atraer nuevas inversiones que le
permita seguir entronizado en el poder.
Primero debemos saber si estas personas serán indultadas, amnistiadas o
dadas por extinguidas sus sanciones, ya que lo común es que el régimen
los libere bajo Licencia Extrapenal, lo que le permite a las autoridades
cubanas regresarte nuevamente a prisión por el más mínimo detalle o
cuando les molesta en las calles.
Eso desearon hacer contra Marta Beatriz Roque, Jorge Olivera, Oscar
Espinosa Chepe y Carmelo Díaz, todos prisioneros de conciencia de la
Primavera Negra del 2003, después de ser liberados por serios problemas
de salud bajo esta modalidad. Ninguno de los ex prisioneros de
conciencia y políticos desterrados en España, Estados Unidos o que
decidieron permanecer dentro de Cuba les ha sido conmutada o extinguida
la sanción por las que fueron injustamente condenados. Aún somos reos.
¿Les aplicarán también a estos la misma medida para tenerlos agarrados
por el narigón?
Una vez en la calle, en supuesta libertad, no tienes posibilidad alguna
de ganar el sustento diario para la vida. El ejemplo es bien claro. En
las oficinas del Ministerio del Trabajo, los ex reclusos son atendidos
de forma diferenciada al resto de las personas que acuden en busca de
empleo, y les ofertan plazas en la recría de cocodrilos en La Ciénaga de
Zapata, metidos en el agua hasta la cintura rodeado de cientos de estos
peligrosos animales, algunos de hasta más de dos metros de largo, o como
enterrador en el más que centenario y rico en obras de arte Cementerio
de Colón, en la ciudad de La Habana.
No es que considere denigrante ningún puesto de trabajo, todos son
necesarios y útiles, pero es que el régimen no tiene otras posibilidades
de oferta. Debemos recordar que el recorte, a lo que yo llamo despido,
de cerca de medio millón de trabajadores por parte del gobierno es un
serio síntoma de la debacle económica que atraviesa la isla. ¿Cómo van a
poder alimentarse, contribuir a la familia, vivir dignamente si no
tienen trabajo?, y después que lo tengan, ¿cómo resolverán los problemas
con el salario que ganen?
En cuanto a que han tenido la posibilidad de aprender y prepararse para
el futuro, durante el cumplimiento de su sanción en la prisión es un
cuento chino, como que lo informó "el chino", como le dicen a Raúl, y en
Cuba " un cuento chino es el equivalente a una burla ". Nada más cercano
a la verdad.
Baste señalar que en el Combinado del Este de la Habana, la prisión más
grande de Cuba y de toda Latinoamérica, con capacidad para 6 mil
personas, el doble de las propuestas para su libertad, se imparten
clases de carpintería, sin que los alumnos puedan tener entre sus manos
una escuadra, un martillo ni un serrucho. Son clases virtuales, sin
equipos ni herramientas. Simple teoría y nada más. Las autoridades
carcelarias consideran que estos objetos son peligrosos y no los
permiten en sus recintos.
La educación en los centros penitenciarios de la isla es una gran farsa.
En papeles todo está muy bien organizado y estructurado, con su
planeamiento, su metodología, su claustro de profesores, con grandes
deficiencias educacionales y morales en su haber, asesores y demás, pero
los alumnos acuden por el incentivo de unas horas más de pabellón
conyugal o una visita extra de las planificadas. Nada más. Es la doble
moral que utilizan los presos, al igual que la mayor parte de la
población cubana, para subsistir ante los horrores de las cárceles cubanas.
En cuanto a los extranjeros, entre los que conocí jamaicanos,
ecuatorianos, colombianos, españoles, rusos, venezolanos,
estadounidenses, de seguro regresarán sin contratiempo a sus respectivos
países, causando el malestar entre los carceleros, quienes les roban y
chantajean parte de las pertenencias que sus respectivas embajadas
acreditadas en Cuba les hacen llegar todos los meses para poder paliar
la pésima comida, que dan en los más de 200 centros penitenciarios
existentes en todo el país.
Cada día menos personas en este mundo cree en los cantos de sirena del
totalitarismo cubano, sólo que se engañan ellos mismos con los cantos de
sirena mil veces repetidos: "es una muestra más de la generosidad y la
fortaleza de la revolución". De ser ciertas estas palabras pronunciadas
por Raúl, entonces no deberían tener temor al reconocimiento de la
disidencia, otorgarle la libertad a todos los presos políticos y de
conciencia que aún están en cautiverio, permitir la libertad de opinión,
prensa e instituciones políticas y sociales de diversas tendencias,
aceptar el derecho a entrar y salir libremente del país sin
restricciones, permitir la libre empresa y la propiedad privada.
Pero nada de eso van a permitir. Los cambios anunciados seguirán siendo
postergados y analizados. Sólo les interesa mantenerse en el poder, y
le dan largas en el tiempo en espera de que la ley natural de la vida
cumpla su cometido final, mientras la nomenklatura sobreviviente se
prepara para tratar de caer como aves de carroña sobre los despojos
dejados por los Castro y discutírselo a su verdadero dueño: el pueblo cubano
http://www.miscelaneasdecuba.net/web/article.asp?artID=34683
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