PORQUÉ LUCHAMOS

PORQUÉ LUCHAMOS
2008-12-05.
José Alberto Álvarez Bravo, Periodista Independiente

(www.miscelaneasdecuba.net).- Tal vez nada supere a los clichés en
capacidad reduccionista. A alguien le cuelgan uno y se jodió. O se
salvó. El "zonzobélico" opaca otras propiedades –o defectos- que pueda
cargar el fulano en la críptica valija de su pecho.

La imagen del "pillo" puede encubrir los atracones de… cualquier cosa
que sostiene a otro sujeto.

Quienes no conocen a fondo a los disidentes cubanos, nos enganchan el
cartel que más encuadre con sus prejuicios, o sus intereses.

Y realmente, en la disidencia cubana "hay de todo, como en botica". ¿Es
exclusivo de este abigarrado conglomerado humano? Por supuesto que no
tiene, ni siquiera debe ser así. A fin de cuentas –pecualiaridades
aparte- somos personas casi como otras cualquieras.

¿Porqué "casi"?

Ahh, Porque los cubanos somos una ínfima minoría de la población
planetaria que vivimos –a estas alturas- bajo un régimen totalitario con
medio siglo de autopostergación.

Porque dentro de la nación cubana, representamos una minoría –de una
inmensa mayoría que puertas adentro disiente del statu quo – que hemos
decidido vivir sin la máscara del conformismo y la doble moral, sin que
importe el precio.

Luchamos porque en nuestra nación se instaure un estado de derecho
moderno, con los poderes compartidos y equilibrados, sin exclusiones de
ningún género; donde se respeten –de verdad- las libertades
fundamentales y la pluralidad.

Luchamos para que se haga realidad el sueño martiano –"con todos y para
el bien de todos"- y no el actual "con los elegidos y para el disfrute
de la élite".

Luchamos por el regreso incondicional de nuestros hermanos de la
diáspora, luchamos porque desaparezcan el odio y la intolerancia
cultivada con celo por el régimen castrista con miras a perpetuarse.

Como el ladrón que grita ¡al ladrón!, el gobierno de Cuba no para
mientes en apelar a mentiras para tratar de descalificar a sus críticos;
"asalariados del imperio" y "terroristas" son los clichés preferidos por
los corifeos asalariados del sistema, impúdicos lamebotas que han
rodeado a todos los poderosos que en el mundo han sido.

¡No somos esclavos de los yanquis, señores mentirosos y manipuladores!
Pero tampoco somos esclavos de ustedes ni de nadie.

Somos hombres y mujeres (y jóvenes, y ancianos) dispuestos a no vivir de
rodillas.

¡Ante nadie!

http://www.miscelaneasdecuba.net/web/article.asp?artID=18371