El régimen prohíbe los actos por el Día de los Derechos Humanos
La Agenda para la Transición había solicitado un permiso a la Policía y
al ministro del Interior, que le fue denegado.
Redacción CE , Madrid | 28/11/2008
Las autoridades informaron a los integrantes de la Agenda para la
Transición (APT) que no están autorizados a celebrar actividades por el
Día de los Derechos Humanos, el próximo 10 de diciembre, tras varias
gestiones que incluyeron visitas a sedes de la Policía y del Ministerio
del Interior.
Vladimiro Roca Antúnez, Guillermo Fariñas Hernández y Marcelo López
Bañobre, miembros de la junta de coordinadores de la APT, intentaron
entregar una solicitud de permiso en la unidad de la policía de Zapata y
C, en La Habana, informó la organización en un comunicado.
"Después de una espera de casi dos horas, un primer teniente, que no se
identificó, con chapa No. 04933, no recibió la carta, y les comunicó que
'consultada con la jefatura y colegiada la respuesta, la policía no
autoriza este tipo de actividades'. No obstante se quedó con una copia
del documento", agregó la nota.
Los solicitantes se dirigieron después al Ministerio del Interior, con
una carta dirigida al general de Cuerpo Ejército Abelardo Colomé Ibarra,
pero una suboficial les comunicó que "no recibían cartas" y que
acudieran al día siguiente.
Según la denuncia de la APT, Roca, Fariñas y Jorge Luis García Pérez
Antúnez acudieron de nuevo a las oficinas de MININT en la Plaza de la
Revolución y la misma suboficial les dijo que tenía órdenes de no
recibir la carta.
"No les podemos recibir la carta, aquí no podemos resolver los problemas
de ustedes", afirmó la nota sobre la respuesta recibida en el MININT.
Cuando los disidentes llegaron a la sede del órgano represivo había un
"fuerte operativo" de seguridad, con autos patrulleros y otros vehículos
de diferentes fuerzas policiales; así como oficiales superiores en las
afueras del Ministerio, "algunos vestidos de civil y conocidos por haber
intervenido en distintas acciones pacíficas de la oposición".
La Agenda para la Transición calificó de "discriminatorio" el acto del
gobierno, porque "multiplica por cero a sus miembros y los hace 'no
personas' ante la Constitución de la República".
La solicitud, firmada por Vladimiro Roca y Martha Beatriz Roque, pedía
autorización para celebrar el aniversario 60 de la Declaración Universal
de los Derechos Humanos en una casa de Nuevo Vedado, La Habana, "con la
presencia de unas cien personas", entre ellas miembros del cuerpo
diplomático y la prensa extranjera.
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