Habemus carne

SOCIEDAD
Habemus carne

Juan González Febles

LA HABANA, Cuba - Julio (www.cubanet.org) - Corre el inquietante rumor
de que la masa ganadera de las provincias Camagüey y Las Tunas será
trasladada a las provincias Habana y Matanzas. El objetivo sería
preparar las llanuras camagüeyanas para la siembra de caña de azúcar.
Una vez eliminadas las siembras de cítricos, los municipios habaneros
rurales y los de Matanzas, correspondientes a la llanura
Habana-Matanzas, se convertirían en ganaderos. Hasta aquí el rumor.

Hasta este momento todos los conocedores cruzan los dedos para que se
dé. La medida contribuirá a reforzar con carne roja la dieta de los
habaneros. No porque el estado la asigne. La labor de experimentados
matarifes clandestinos la colocará sobre las mesas de La Habana. Al
precio módico de las ventas azarosas.

Si los municipios rurales del sur de la provincia Habana se convierten
en ganaderos, todos comeremos carne y no sólo la nomenklatura. No puede
esperarse menos de provincias que se niegan a aportar la cuota de
policías que necesita el régimen para el control represivo de la
capital. Es un hecho que los habaneros se niegan a vestirse de policías.
Prefieren vender algo o fabricar balsas.

La otra cara de la moneda sería la pérdida del esfuerzo y de las
plantaciones de cítricos de la llanura Habana-Matanzas. Estas quedarían
convertidas en pastizales. Para el ciudadano común, la pérdida no lo es
tanto. A fin de cuentas era una producción destinada al mercado
internacional y a las necesidades de un turismo, por supuesto internacional.

Aunque la medida alcanza las proporciones de desatino de la desecación
de la Cienaga de Zapata, los 10 millones de toneladas de azúcar de 1970,
las vacas enanas y el Cordón de La Habana, nada la detendrá. Viene de
"arriba".

Por cierto, es curioso como en esta ajena y abstracta región superior,
nadie calcula cuánto tiempo tarda en crecer una mata de naranjas. Pienso
que pocos o ninguno en ese lugar han sembrado un árbol. Creo que tampoco
han trabajado más de un año ganando un salario.

Es algo propio de la masa dirigente en Cuba, ignorar, especular, gastar
y ordenar. Es una lástima que las consecuencias las paguemos todos.
Pero, confortemos el espíritu y veamos el lado positivo de todo este
penoso asunto. Disfrutemos. Habemus carne.

http://www.cubanet.org/CNews/y06/jul06/06a6.htm