progresos
Sábado 19 de Junio de 2010 11:18 Agencias
Los gobiernos de Cuba y Estados Unidos celebraron este viernes en
Washington una nueva ronda de su diálogo migratorio, pero hubo pocos
signos de progreso y funcionarios estadounidenses protestaron nuevamente
contra la detención en La Habana de un contratista acusado de espionaje.
El portavoz del Departamento de Estado Philip J. Crowley dijo que pese a
algunos obstáculos, también hubo progresos en la cooperación en temas
migratorios, como la validación de la efectividad del mecanismo que
busca promover la emigración segura y ordenada, informó Reuters.
El encuentro, el tercero desde que el presidente Barack Obama reanudó
las citas, interrumpidas en 2004 por su predecesor George W. Bush, se
basa en los acuerdos migratorios firmados en la década de los noventa
para evitar éxodos masivos como el del Mariel, en 1980, y la "Crisis de
los Balseros", de 1994.
"El equipo estadounidense (...) reafirmó el compromiso de Estados Unidos
de promover una migración legal ordenada y segura", indicó una
declaración emitida por el secretario adjunto del Departamento de
Estado, Philip J. Crowley.
La reunión también sirvió para "establecer mecanismos más efectivos de
cooperación en el enfrentamiento al tráfico ilícito de personas", según
un comunicado emitido por la Sección de Intereses de La Habana en
Washington, reportó la AP.
Aunque el texto no especificó cuáles son los nuevos mecanismos de
cooperación, mencionó que la delegación encabezada por el viceministro
de Relaciones Exteriores Dagoberto Rodríguez, propuso celebrar un
encuentro binacional de expertos para "combatir el uso de documentos de
viaje falsos".
La reunión fue presidida por el subsecretario de Estado Adjunto para el
Hemisferio Occidental, Craig A. Kelly, y el vicecanciller Rodríguez.
La delegación del régimen reiteró su reclamo para que Estados Unidos
abandone la política migratoria hacia la Isla, que ofrece trato
preferencial a los cubanos que llegan territorio estadounidense.
El vicecanciller Rodríguez "reiteró que este contrabando (de personas)
no podrá eliminarse ni se podrá alcanzar una emigración legal, segura y
ordenada entre los dos países, mientras se mantengan la Ley de Ajuste
Cubano y la política de pies secos-pies / pies-mojados", dijo el
comunicado cubano.
"Estos componentes de la política migratoria de los Estados Unidos hacia
Cuba violan el espíritu y la letra de los Acuerdos Migratorios. Además,
constituyen el principal estímulo a las salidas ilegales desde Cuba y al
tráfico de personas", señaló un comunicado que entregó la cancillería
cubana a medios de prensa extranjeros en La Habana.
Por su parte, la delegación estadounidense pidió nuevamente la
"liberación inmediata" del contratista Alan Gross, detenido desde
diciembre pasado en la Isla sin que se hayan presentado cargos en su contra.
La secretaria de Estado, Hillary Rodham Clinton, había pedido
públicamente su liberación el jueves, tras reunirse con la esposa y
familiares del contratista.
Gross, de 60 años, está siendo investigado bajo acusaciones de
distribuir equipos de comunicación satelital prohibidos a disidentes
cubanos.
El canciller cubano, Bruno Rodríguez, dijo esta semana en La Habana que
Gross se encuentra detenido por "haber cometido graves delitos (…) al
servicio de la política subversiva del gobierno de los Estados Unidos
contra Cuba".
Funcionarios estadounidenses sostienen que Gross sólo estaba
suministrando acceso a internet a la comunidad de judíos, pero admiten
que es empleado de una empresa que recibe fondos de la Agencia
Estadounidense para el Desarrollo Internacional y entró a la Isla con
visa de turista sin declarar su objetivo.
El comunicado cubano no hizo alusión al caso del contratista Gross.
En la reunión, la delegación norteamericana pidió también que su Oficina
de Intereses en La Habana pueda operar "efectivamente" y monitorear el
bienestar de los emigrantes repatriados, según dijo el Departamento de
Estado.
Además reiteró la necesidad de que La Habana acepte la repatriación de
ciudadanos cubanos que Estados Unidos desea deportar porque incurrieron
en actos delictivos.
La Habana invitó a la delegación estadounidense a celebrar la próxima
ronda migratoria a fines de 2010 en la Isla.
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