30-06-2010.
Hugo Araña
Corresponsal de Misceláneas de Cuba
(www.miscelaneasdecuba.net).- Los problemas subsisten. El
desconocimiento de cuál ómnibus es el que lo llevará para su centro
turístico persiste por la falta de señalización que debe tener cada
transporte. Los puntos de recogida para la ida y regreso no se toman en
cuenta. A veces el obrero no aborda el indicado.
Las protestan abundan. Ya se han desatado broncas entre inspectores y
choferes y no son pocas las sanciones. Mientras los afectados que son
los trabajadores, lo mismo llegan tarde a sus labores, como al regresar
a sus hogares.
El sistema impuesto hace alrededor de un mes, con el propósito de
racionalizar el transporte y el combustible que se utiliza desde las
ciudades de Cárdenas Matanzas para transportar a los obreros del turismo
hacia la Playa de Varadero, sufre -sin exageración-, de una anarquía que
hasta estos momentos, al parecer nadie puede superarla.
El mismo semanario Girón matancero se hizo eco de la situación página
completa. La crítica, aunque mesurada no han podido soslayarla. El caos
hace de las suyas.
A todas luces, y por la situación reinante, este Proyecto de ahorrar en
lo posible, se implantó sin una coordinación adecuada para que
funcionara debidamente.
Mientras, los afectados protestan. Este Comunicador semanas atrás lo
denunció. Cómo se restablecerá el orden él ignora. Tanto los
responsables, que de seguro no tienen la necesidad de depender de estos
ómnibus, al emprender este Proyecto no realizaron una verdadera
organización para hacerlo viable.
Pero no importa. Estos tienen sus carros con chapas azules estatales. Y
los afectados, como rebaños de ovejas, están supeditados a sufrir los
errores que dichos directivos, como Blas Verrier, Director de la Empresa
de Transportación para Trabajadores en Matanzas.
http://www.miscelaneasdecuba.net/web/article.asp?artID=28609
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