OLA REPRESIVA
En la cresta de la ola
Rafael Ferro Salas, Abdala Press
LA HABANA, Cuba - Marzo (www.cubanet.org) - Este 18 de marzo se
conmemoró el tercer aniversario de la ola represiva contra disidentes y
periodistas independientes cubanos. Setenta y cinco opositores fueron
detenidos durante los operativos de ese día del año dos mil tres.
Las autoridades de Cuba no se cansan de clamar por la liberación de
cinco espías que guardan prisión en los Estados Unidos, pero no dicen
nada sobre los presos políticos cubanos encarcelados en la isla. Tampoco
le dan el derecho de exigir por la libertad de esos presos a sus
familiares ¿Qué tribuna para sus reclamos tienen los familiares de los
presos políticos cubanos? Ninguna, y cuando reclaman lo hacen a riesgo
de ser también encarcelados.
No es comparable la situación carcelaria de los cinco espías que están
presos en los Estados Unidos con la que padecen en Cuba los presos
políticos. Los cinco cubanos que fueron sorprendidos espiando en Estados
Unidos cargan un delito mucho mayor que el atribuido a los setenta y
cinco periodistas y opositores detenidos en marzo del año dos mil tres.
Los opositores encarcelados no estaban espiando para nadie.
A los encarcelados de marzo de 2003 les fueron impuestas condenas que
sólo se aplican en el mundo a los asesinos en serie. Los presos de marzo
de 2003 reclamaban sus derechos como ciudadanos y exigían libertades que
les son negadas a todos los cubanos dentro de la isla. Eso no es delito
en ninguna parte del mundo.
Ahora las amenazas se han recrudecido contra los disidentes y opositores
que aún están en las calles. También aumenta el acoso contra los
periodistas independientes que se mantienen trabajando para que en el
mundo se conozca la verdadera realidad que se vive en la isla. Nadie
sabe qué puede suceder en un futuro, todo depende de los nuevos antojos
del que gobierna, y puede surgir una nueva ola represiva con fuerza de
tsunami.
A pesar de las prohibiciones y la negativa del gobierno a dar el derecho
de reclamo a disidentes y opositores dentro de la isla, éstos mantienen
la lucha. La prensa independiente es la voz de los inconformes, y no
cesa tampoco de trabajar. Nunca está de más poner al mundo en aviso. Lo
cierto es que la policía política sigue reprimiendo y quitando derechos
a las personas.
La disidencia cubana tiene ya la fecha del 18 de marzo como suya. El
mejor homenaje a los encarcelados políticos es el de seguir haciendo por
lo que hacían ellos. Demostrarle al mundo que, desde cualquier lugar, a
lo largo y ancho de la isla, la oposición enfrenta los retos diarios en
la cresta de la ola.
http://www.cubanet.org/CNews/y06/mar06/19a6.htm
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