Miles llegan por la frontera sur
POR CAROL J. WILLIAMS | LOS ANGELES TIMES
July 26, 2008
LA HABANA - En momentos en que las autoridades de Estados Unidos están
llevando a cabo una intensa campaña para detener la inmigración ilegal
en aguas del Estrecho de la Florida, las autoridades mexicanas han
reportado un aumento en la detención de cubanos al tiempo que los
contrabandistas cambian de rutas para transportar ilegalmente carga humana.
Bajo la provisión de la ley de inmigración de 1995 conocida como "pies
secos-pies mojados", los cubanos que logren llegar a suelo
estadounidense puede quedarse y obtener la residencia legal. Dado que el
Estrecho de la Florida se encuentra fuertemente vigilado por los
guardacostas, muchos cubanos se dirigen ahora a la mexicana Península de
Yucatán para luego cruzar a pie la frontera entre México y Estados
Unidos, donde apenas se les detiene por unos días.
Incluso antes de llegar la temporada alta en el contrabando de personas,
más de 1,000 cubanos han sido detenidos en México a fines de junio,
comparado con 1,359 en todo el año 2007. Más de 11,500 cubanos lograron
llegar y cruzar la frontera entre México y Estados Unidos el año pasado,
un 33 por ciento más que el año anterior y casi el doble que el número
de cubanos que llegó a México en 2004.
El número de cubanos detenidos en México aumentó un 500 por ciento en
los pasados cinco años, según explicó Edmundo Ramírez, un legislador del
Partido Institucional Revolucionario, hablando ante una reunión del
parlamento mexicano. Ramírez habló del reciente secuestro de un autobús
como evidencia de que los contrabandistas tienen enorme poder económico.
En el incidente ocurrido el 11 de junio en el sur de México, un grupo de
hombres armados secuestraron un autobús con 33 cubanos que habían sido
interceptados en Yucatán y eran transportados a un centro de detención
en el estado de Chiapas.
Amador Rodríguez, fiscal de Chiapas, atribuyó el incidente a
contrabandistas de Miami dispuestos a cumplir con su misión de entregar
el cargamento en suelo estadounidense.
Dieciocho cubanos del grupo aparecieron una semana después en un cruce
de Texas, donde fueron detenidos y eventualmente puestos en libertad.
La ruta a través de México se ha convertido en la favorita de los
contrabandistas que buscan evitar enfrentarse a la vigilancia de los
guardacostas estadounidenses en el Estrecho de la Florida.
La intercepciones del servicio de guardacostas de Estados Unidos
aumentaron este año un 20 por ciento, con 323 capturas desde el 1 de
octubre de 2007.
Hasta principios de este mes, 108 contrabandistas capturados han sido
encausados; una cifra que se acerca a los 113 que fueron encausados el
año pasado, explicó Alicia Valle, fiscal adjunta del fiscal de Estados
Unidos en Miami.
Los encauzamientos judiciales revelan las peligrosas operaciones que se
toman en lo que en el sur de la Florida se considera un servicio de
entrega. En junio, una mujer y un niño de once años murieron cuando el
bote contrabandista chocó con una embarcación con 20 cubanos en el
Estrecho de la Florida, los traficantes trataban desviar la atención de
los guardacostas.
También en junio, 42 cubanos abordaron una embarcación y jamás se supo
de su paradero. En agosto, un hombre murió en aguas cubanas cuando un
lancha le pasó por encima; el hombre había sido tirado al agua por los
contrabandistas, quienes buscaban disuadir a los guardacostas.
"Se trata sin duda de operaciones criminales, en los que no se tiene
respeto por la vida humana", dijo el teniente Matt J. Moorlag, oficial
de relaciones públicas del Servicio de Guardacostas de Miami.
"Si la comunidad cubana de Miami continúa pagando por el transporte de
cubanos de la isla, entonces el problema del contrabando seguirá
aumentando".
El precio para traer a cubanos de la isla aumentó el año pasado, de
$7,000 a $15,000. Esto significa que la demanda ha aumentado, o que el
servicio se ha hecho tan difícil que es necesario cobrar un precio alto,
explica Zachary Mann, agente especial y portavoz de la Oficina de
Aduanas y Protección de Fronteras de Estados Unidos.
Bajo la ley "pies secos-pies mojados", los cubanos que no puedan pisar
tierra estadounidense son repatriados a Cuba.
Ramón Saúl Sánchez, exiliado cubano, líder del grupo Movimiento
Democracia, responsabiliza tanto a Washington como a La Habana del
negocio del contrabando de cubanos.
"Mientras haya una dictadura en Cuba, habrá un éxodo", señala Sánchez.
Sin embargo, Sánchez también critica las sanciones de Estados Unidos,
que limita las visitas de cubanos a la isla a cada tres años, lo que
motiva que más cubanos paguen a contrabandistas para poder llegar a
Estados Unidos.
http://www.sun-sentinel.com/news/local/cuba/sfl-flelamcuba0726brjul26,0,6576916.story
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