La blogosfera independiente no cree que los ciudadanos puedan
beneficiarse del nuevo cable de fibra óptica submarino que funcionará
entre la isla y Venezuela a partir de 2011
CARMEN MUÑOZ / MADRID
Día 05/11/2010 - 11.15h
«¿El cable submarino entre Cuba y Venezuela traerá algún kilobyte para
blogueros alternativos?», se preguntaba una escéptica Yoani Sánchez este
jueves en Twitter. Tanto la bloguera disidente como sus colegas Luis
Felipe Rojas y Orlando Luis Pardo (los tres están en la plataforma
bloguera «Voces cubanas») ponen en duda que el ciudadano corriente pueda
acceder a internet en la isla cuando el nuevo cable de fibra óptica
comience a funcionar a mediados de 2011.
REUTERS
«Granma», el órgano oficial del Partido Comunista, ya advertía el
miércoles que el cable submarino entre los dos países aliados no
significará una ampliación del acceso a la red que tanto reclaman los
cubanos. Según el diario oficial, las operaciones con fibra óptica
permitirán multiplicar por tres mil la capacidad de conexión de Cuba con
el exterior, pero matizaba que «la socialización del servicio dependerá
más de buscar en las reservas de eficiencia que de la ampliación de la
red». La instalación del cable entre Cuba, Venezuela y Jamaica comenzará
el próximo enero, según informa Efe.
Los cubanos que no trabajan en determinadas instituciones o no ocupan
ciertos cargos deben recurrir a servidores extranjeros para tener su
propia página web, según denuncian los tres blogueros a ABC. «Tener una
web en un servidor nacional es un "privilegio" sólo accesible a
instituciones probadas desde el punto de vista ideológico», apunta la
autora del blog «Generación Y». Es decir, organismos como la Unión de
Jóvenes Comunistas o la Unión de Escritores y Artistas de Cuba.
Orlando Luis Pardo, autor del fotoblog «Boring home utopics» y del blog
«Lunes de post-revolución», explica que mientras los ciudadanos
corrientes no puedan contratar una cuenta de internet con la telefónica
estatal Etecsa, el nuevo cable de fibra óptica submarino «será algo
secundario y seguirá el "apartheid" informativo que sufren los cubanos
de a pie».
Luis Felipe Rojas, el bloguero de «Cruzar las alambradas», cree que
«habrá más restricciones aunque aumente la capacidad de navegación».
Residente en Holguín, Rojas denuncia la existencia de un solo cibercafé
de acceso libre para las cinco provincias orientales, el del hotel Meliá
de Santiago de Cuba. «Una hora en uno de sus seis ordenadores cuesta
ocho dólares y la conexión es muy lenta», precisa. El bloguero disidente
no confia en la próxima apertura de cibercafés o de cuentas de internet,
ni en que terminen las restricciones al contratar una línea telefónica
particular. Tampoco ve muchos lugares en los que se vendan ordenadores.
Mercado negro
Tanto Pardo como Sánchez alertan, además, sobre la proliferación de
cuentas de internet en el mercado negro.
Aunque la mayoría de los cubanos siga sin internet a pesar de este
avance técnico, Yoani Sánchez está convencida de que el régimen
comunista «va a perder el argumento» que expone cada vez que le reclaman
ese derecho: que Washington no permite a Cuba acceder a los cables de
fibra óptica que rodean la isla, uno de ellos a sólo 32 kilómetros de La
Habana. Desde 1996 el país caribeño llega a la red a través de un enlace
por satélite. «Quedará al descubierto que en Cuba no hay voluntad
política para que los ciudadanos accedamos masiva y libremente a
internet», advierte la bloguera cubana.
http://www.abc.es/20101105/internacional/cuba-seguira-apartheid-informativo-201011050011.html
No comments:
Post a Comment