Los cubanos quieren irse a EE.UU. Yo doy gracias a Dios de estar aquí»

Miércoles, 30 de Enero de 2008
«Los cubanos quieren irse a EE.UU. Yo doy gracias a Dios de estar aquí»
ANTONIO PÉREZ FERNÁNDEZ Y FAMILIA | ASILADO CUBANO POR PERSECUCIÓN
POLÍTICA Y CON NACIONALIDAD ESPAÑOLA

«Estuve apresado más de tres años por asistir a reuniones clandestinas
en contra del gobierno de Fidel Castro» Hace dos años, Antonio era
entrevistado por este periódico en calidad de cubano acogido al asilo.
Entonces su situación era bien distinta a la de hoy. Su hijo mayor
permanecía en la isla caribeña y vivía bajo el protectorado de las
autoridades españolas como víctima de un régimen autoritario. Hoy,
Antonio Pérez Fernández, nieto de asturianos, ya es español. Tiene la
nacionalidad desde el pasado mes de noviembre y ya tiene en proceso los
expedientes de su mujer y de sus dos hijas, de 18 y 17 años. La alegría
es también inmensa cuando anuncia que su hijo, la mujer de éste y su
bebé ya están en España trabajando como farmacéuticos.

Antonio, Toni, trabaja como camionero. Llegó a España el 20 de
septiembre del 2001. Ese mismo día solicitó el estatus de asilo en el
aeropuerto de Barajas. En Cuba estuvo perseguido por el régimen por sus
reiteradas denuncias de violaciones de derechos humanos. Integrante de
la organización Carlos Manuel de Céspedes, fue apresado y encarcelado
tres años por participar en reuniones clandestinas orientadas a plantar
oposición al gobierno de Fidel Castro. Entre otras actividades, Antonio
recorría las iglesias para recaudar fondos para los presos políticos,
«un concepto que en Cuba no existe puesto que allí todos son presos
comunes », denuncia. También era informante de Radio Martí, la voz
cubana desde Estados Unidos.

Dos años y dos meses después de llegar a León, trajo a su mujer y a sus
hijas. Aquí tienen la vida prácticamente normalizada. «La mayoría de los
cubanos se van a Estados Unidos, pero yo doy gracias a Dios de haber
venido a España y de que los españoles nos den su cariño». Como
ciudadano español, Antonio puede viajar por todo el mundo, excepto a
Cuba, cuyo gobierno es el único capacitado para autorizar la entrada o
salida de sus ciudadanos a través de la denominada tarjeta blanca. «Si
yo voy con el pasaporte español, en cuanto llegue a Cuba y vean que soy
nacido allí no me dejan entrar. Y con la nacionalidad cubana tampoco
puedo ir porque salí precisamente por una persecución política y eso me
ha dado el estatus de asilo», se lamenta Antonio. Su problema ahora es
entrar en la isla para visitar a su padre, enfermo de alzhéimer y al que
hace mucho tiempo que no ve. «Ya he pedido el permiso de entrada a la
Embajada de Cuba en España, pero no tengo respuesta».

En estos años, el matrimonio ha tenido los típicos problemas del
extranjero que busca trabajo. A él no le han querido subir el sueldo
tras varios años empleado en una misma empresa y a ella le han advertido
que mientras Fidel siga gobernando en Cuba no va a tener opción de
homologar su formación y acceder a un empleo relacionado. «Nosotros, por
edad, nunca vamos a estar totalmente considerados en España, pero
nuestras hijas son de aquí y queremos que sigan aquí para que tengan sus
oportunidades», afirma Carmen.

http://www.diariodeleon.es/inicio/noticia.jsp?CAT=345&TEXTO=6524194