Boxeador cubano retiene su título mundial profesional
Servicios de El Nuevo Herald
El boxeador cubano Yoan Pablo Hernández defendió con éxito su título
crucero Fedelatin de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB) y se adueño de
la vacante corona latina del Consejo Mundial de Boxeo (CMB), al noquear
en el primer asalto al argelino Mohamed Azzaoui.
El combate entre Hernández y Azzaoui resultó uno de los pleitos
principales de la cartelera organizada en el Seidensticker Halle, en
Bielefeld, Alemania.
En la pelea, el cubano impuso su gran calidad y con un fulminante
directo de zurda mandó a la lona a su rival que se reincoporó a la
cuenta de nueve, pero incapaz de continuar parado sobre el cuadrilátero.
El flamante campeón nunca tuvo alguna resistencia por parte del
pugilista Azzaoui. Con esta victoria en apenas 2:08 minutos del primer
asalto, el boxeador antillano mejora su récord a 14-0, con 8 nocauts,
mientras que Azzaoui cayó a 22-2, con 8 fuera de combates.
Hernández nació en Pinar del Río y fue campeón mundial juvenil en el
2002 en Santiago de Cuba. Luego sumó una medalla de plata en los Juegos
Panamericanos de Santo Domingo 2003 tras caer derrotado en la final por
el mexicano Ramiro Rudecindo.
Este subcampeonato en Quisqueya le valió la clasificación a los Juegos
Olímpicos de Atenas 2004 donde perdió en la primera ronda del evento
contra el ruso Evgueni Makarenko..
En el 2005 salió en una gira por Europa con el equipo nacional de boxeo
cubano. Tras perder la final de la Copa Química de Halle ante el local
Alexander Povernov, siguió los pasos de Juan Carlos Gómez y solicitó
asilo político en Alemania.
Debutó en el deporte rentado el 3 de septiembre del 2005 con un nocaut
sobre el checo David Vicena en Berlín.
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