La Farsa Electoral en Cuba
En estos momentos se están llevando a cabo en Cuba unas supuestas
elecciones para escoger a los delegados del Partido Comunista a lo que
definen como Asambleas Municipales del Poder Popular. Es una farsa sin
ningún sentido institucional ni ideológico. Es una convocatoria que
puede servir de cierta gimnasia de los comunistas para que se sientan
que están participando en el ejercicio del poder público, aunque esa
participación sólo corresponde a la alta jerarquía, a lo que se llama en
ruso la "nomenklatura".
En la Cuba totalitaria marxista-leninista no hay en absoluto nada que
pueda interpretarse como que existen elecciones de carácter democrático
para elegir autoridades. Por consiguiente, nadie puede llamarse a engaño
en el sentido de creer que hay elecciones, aunque se les atribuya
fraude, pero que en algunos aspectos son elecciones. Lo que allí ocurre
es una simulación más para consumo externo que para consumo interno,
aunque en lo interno sirve para que ciertos sectores del Partido
Comunista crean que han sido tomados en cuenta.
Como quiera que ya son casi cuarenta y nueve años de tiranía
totalitaria, dentro de Cuba hay gente de cincuenta años de edad y más
que no saben lo que significan las instituciones democráticas dentro de
las cuales las elecciones deberían de ser una forma de gobierno. Hay que
hacer un esfuerzo para que dentro de Cuba la gente sepa que esas no son
elecciones como las define un diccionario político o el diccionario
normal de la lengua. Seguramente habrá quienes, obligados por las
circunstancias que los rodean, acudan a esas urnas electorales que no
cumplen ninguna finalidad cívica ni política en el sentido integral del
concepto. Son fórmulas prefabricadas por la tiranía en las cuales
participa mucha gente que va obligada a votar. Y habrá muchos que sin
incurrir tal vez en una actitud vigorosa contraria a la tiranía, dejen
de votar.
En el extranjero es muy importante hacer esta aclaración porque no
faltan los que en un afán de encontrarle explicaciones al terrible
fenómeno político que sufre el pueblo cubano desde hace cuarenta y nueve
años crean que se ha logrado una elección popular y que las autoridades
que surgen de ella sean más o menos legítimas. Y de legítimas no tienen
nada. Se trata de otra burla para los cubanos de adentro y para el mundo
civilizado.
No comments:
Post a Comment