El Sol que Castro no podra tapar

El Sol que Castro no podrá tapar
Por Idolidia Darias
Bitácora Cubana, 27 de marzo de 2006 - La Habana

El cartel que puso Castro frente al edificio de la Habana donde está la
Oficina de Intereses de los E.U.A es la pretensión de tapar el sol con
un dedo. No me extraña, ese tirano siempre va a los extremos; o busca
“curas” espantosas o busca “curas” increíbles. Y los ejemplos sobran. En
marzo del 2003 llevó a prisión en un golpe que él se creyó “maestro” a
75 cubanos disidentes, opositores y periodistas independientes, pero al
mes siguiente 75 o más, cubanos, asumieron las posiciones de los hombres
y la mujer encarcelados.

En abril del 2003 fusiló a tres jóvenes, negros que no habían cometido
ningún delito ni tenían antecedentes criminales, por tratar de irse del
país en una lancha y usar en la fuga dos rehenes de origen no cubano,
cuestión que el consideró de manera personal crimen de ‘lesa humanidad’.
También en abril hizo juicios sumarísimos adjetivados como
“ejemplarizantes’ a los 75 patriotas que el mes anterior encarceló,
incluso llegó a sugerir en las actas primarias al juicio PENA DE MUERTE
para algunos de ellos por considerarlos traidores (sin embargo el
‘delito’ que cometieron fue pensar diferente al régimen y decirlo en
todas partes con valor y claridad). A otros de los 75 les programaron
26, 25 y 20 años por pensar, escribir y declarar que en Cuba hay
tiranía, violaciones de derechos humanos, atropellos, falta de justicia
social…y que el país va al desastre social.

El 18 de marzo para ser más exacta a las cuatro de la tarde se
cumplieron tres años del inicio de lo que se calificó como la Primavera
de Cuba.

El resumen para los familiares de los encarcelados es el dolor, la rabia
y la impotencia ante el desprecio que el régimen castrista ha mostrado
siempre para quienes se le oponen. El resumen para los amigos y los
compatriotas también es de angustia por saber que hombres de valor y de
hidalguía bien ganada se consumen en las tapiadas del furher caribeño,
incluso concientes del precio que tiene para ellos el futuro cuando sus
cuerpos dañados por la tortura física y mental, por el hambre y las
carencias le cobren esa deuda de salud que la prisión les ha impuesto.

El furher caribeño sabe, está bien enterado de cuanto dolor infringe a
sus oponentes pero a él no le importa, se revuelca en su verborrea
vacía, pone carteles, levanta muros, agrega banderas en cualquier lugar
de la isla y se cree, en su megalomanía auto-estudiada propia de un
histrión sicópata que va a tapar el sol con un dedo, que no van a surgir
nuevos opositores en su isla, que no habrán nuevas denuncias, que no lo
van a odiar un poquito más todos y cada uno de los que a veces le siguen
el jueguito o le aplauden con los dedos cruzados los discursos o sus
intervenciones televisivas dentro de la isla, e incluso bien resguardado
de los que le rodean por miedo a una posible sedición o a una bala perdida.

El Coma-Andante (como lo llama Roberto Luque Escalona) tiene miedo de
todo y de todos y pretende tapar el sol con dedo. Qué tontería !. Ya los
desastres él no los tapa ni en su isla ni a la opinión pública mundial.
Las heridas que tenemos todos los amantes de la Patria por los 75
compatriotas que encarceló, por los miles de hombres que fusiló en el
Escambray, por los que huyendo de ‘su isla’ perdieron la vida en el
estrecho de la Florida, no las puede tapar.

Las heridas que tenemos todos por saber que a miles de niños y jóvenes
en Cuba los ha condenado a una vejez prematura por las carencias
actuales y pasadas que lastran el desarrollo físico e intelectual del
ser humano tampoco las puede tapar ni con carteles, ni discursos, ni
marchas y desfiles.

Las heridas, las humillaciones, los éxodos impuestos y voluntarios, los
dolores y desgarramientos de la nación son manchas en el sol de la
libertad y esas, nunca Castro las podrá tapar.

http://www.bitacoracubana.com/desdecuba/portada2.php?id=1685