Sunday, November 11, 2012

Honoris causa al represor de Cuba

Publicado el jueves, 11.08.12

Honoris causa al represor de Cuba
Felipe Trigos

Aunque usted no lo crea, la semana pasada la Universidad Autónoma de
Morelos en México le otorgó el título Doctor Honoris Causa a Fidel
Castro por "sus aportaciones a la agricultura, la educación y la cultura".

Es vergonzoso que una universidad en un país democrático otorgue dicho
título a un dictador. Sobre todo por esas supuestas aportaciones.

Examinemos los "logros" de Castro y sus contribuciones a la isla en lo
que se refiere a agricultura, cultura y educación.

Tal vez la universidad ignora que bajo el régimen de Castro, la cultura,
la educación y la agricultura se han visto seriamente afectadas por el
régimen de Castro.

En las granjas tipo koljoz o soviéticas, el Estado tiene un control
absoluto sobre la producción. Esto hace que hace que la expectativa de
crecimiento del agricultor sea nula debido a la ideología comunista que
el régimen implementó desde hace más de 50 años.

Cuando se habla de mejoras en la agricultura, Cuba es el último país que
debe considerarse exitoso en la materia.

La universidad quizás ignore que la agricultura cubana solo cubre el 20%
de las necesidades alimentarias de la población, lo cual obliga al
gobierno a importar productos y a gastar miles de millones de dólares
para alimentar al pueblo.

Se dice erróneamente que el embargo estadounidense es culpable de dicha
situación y del retraso económico en Cuba. Por otra parte, es importante
destacar que en toda su historia Cuba nunca fue capaz de abastecer las
necesidades alimentarias del pueblo con su producción agrícola.

Resulta irónico entonces que se premie a Castro por contribuir a la
debacle de Cuba en materia agrícola.

Si nos enfocamos en la parte cultural la situación no es distinta. Cuba
era un país que contaba con grandes exponentes de música popular.
Actualmente son extranjeros los que buscan encontrar y promover lo que
queda de esta comunidad. Las restricciones en términos de libertad de
expresión y prensa limitan las herramientas que artistas e intelectuales
necesitan para realizarse como tales.

Los profesores y alumnos de esta universidad no tendrían la libertad de
expresar lo que piensan y otorgar premios a personas que comparten
ideologías políticas contrarias a las del gobierno que las rige. La
Universidad Autónoma de Morelos tiene todo el derecho de otorgar este
premio. A lo que no tiene derecho es a ignorar la realidad de un país
que sufre día a día bajo uno de los regímenes más autoritarios en la
historia de la región y que se ve cada vez menos culto, menos educado y
menos próspero.

Cuba y su proteccionismo limitan las oportunidades del estudiante para
incrementar su conocimiento. Si bien el país cuenta con un índice de
analfabetismo muy bajo, a nivel medio y superior la educación en Cuba no
puede prosperar debido a la falta de tecnología y de apertura a ideas
que chocan con la ideología autoritaria del régimen. ¿Cuándo se ha visto
que una universidad moderna pueda prosperar sin libertad de ideas y sin
acceso a tecnología de punta que permite a sus investigadores alcanzar
nuevos horizontes en la educación?

¿Cómo entonces puede otorgarse este título a uno de los dictadores más
dañinos en la historia de la región?

Universidades como la Autónoma de Morelos tal vez siguen creyendo en ese
ideal utópico que ofrece el supuesto sueño de la equidad comunista y se
olvidan del sufrimiento al que ha sido sujeto el pueblo cubano desde que
los Castro llegaron al poder.

Esta universidad, que ostenta el lema "Por una humanidad culta", parece
carecer de humanidad y cultura al premiar a un demagogo autoritario que
ha tratado al pueblo de Cuba con todo menos humanidad.

México y todas las universidades de Latinoamérica deben dejar atrás esa
idea romántica que habla de un pueblo libre y próspero en Cuba. El
pueblo cubano ha vivido sin libertades, sin la oportunidad de prosperar
y secuestrado por una ideología que solo promueve los intereses de la
autocracia que los gobierna.

Las universidades de la región, mas allá de otorgar premios a quien no
los merece, deberían promover el restablecimiento de la democracia, la
defensa de la libertad de expresión y la liberación de todos aquellos
que en busca de ese sueño son encarcelados para socavar las ideas que
hacen que una sociedad sea próspera en términos políticos, económicos,
culturales y sociales.

Analista de la firma Visión Américas LLC en Washington, DC.

http://www.elnuevoherald.com/2012/11/08/1339973/felipe-trigos-honoris-causa-al.html

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